Llega el momento de la verdad. Jon Fernández lleva desde la derrota en USA (ante Michel Rivera), entrenando como un animal y preparándose para los grandes combates que están por venir. Atrás quedaron las dudas y la desgana por seguir en este deporte. Los únicos que le pudieron parar en estos dos años, fueron los jueces, en Málaga, yo le vi ganar a Samuel Molina, aunque no por mucho, en un auténtico combatazo, aunque esa la vi en vídeo y seguramente se escapan muchas cosas. La siguiente si la pude disfrutar en directo, en el Wizink Center, ante un referente como Petrov. Se salió del mapa esa noche el bilbaíno.
Estar en el punto más álgido de tu carrera nunca garantizó nada a nadie, y menos en el boxeo, deporte a veces muy cruel. En un simple «tornar» de ojos, tu cuerpo puede despertar en la poca luz de un vestuario inhóspito y haciéndote preguntas existenciales, tales como ¿qué hago jugándome la vida por 600 euros?, preguntas que normalmente tienen la respuesta más fácil de dar en el mundo, y es el silencio ante un lunes de entreno. Y se acabó la duda poética, para dar paso a la rutina diaria de acción.
Al español, Jon Fernández le llega por primera vez en su carrera la oportunidad de disputar el título de Europa absoluto, en su día ganó el de la Unión Europea. Éste, es el bueno. Eddie Hearn no es el rival, aunque los españoles a veces hemos sentido que el que pegaba golpes a nuestro boxeador en forma de decisiones arbitrales, era el bueno de Eddie, el dueño de Matchroom Boxing. No me malinterpreten, hay que estar muy agradecidos con las «chances» y buenas bolsas que han podido ganar cientos y cientos de púgiles viajando a las Islas Británicas a boxear. Kiko Martínez y Sergio García han logrado éxitos muy importantes, ante ingleses, en veladas de Matchroom, por ejemplo. Pero también existe esa leyenda negra, de boxear fuera, que se han empeñado en agrandar muchos jueces british. O lo matas o empatas, que se dice. Como ya habréis intuido, la velada la organiza Matchroom Boxing después de ganar la subasta a PCI Promotions, el rival, un inglés invicto y ranqueado muy arriba en listas mundiales (Dalton Smith), y lugar, Sheffield. En concreto, en el Sheffield Arena.
Ya habrá tiempo de diseccionar al rival, y de analizar lo que creo que puede ocurrir esa noche, faltan todavía más de dos meses. La buena noticia está dicha. Oportunidades para el boxeo español, tan necesarias como merecidas. Feliz de que lleguen. Y deseando que no pase nada raro, ni lesión, ni nada, y el 28 de septiembre tengamos a Jon disputando el EBU en Inglaterra por DAZN, como está firmado.