Gran día para Noche de Boxeo, o lo que es lo mismo, gran día para un servidor. Es un pedazo de honor poder tener el placer de contactar con ídolos de cuando nacía mi afición por el noble arte. En este caso he tenido la suerte de hablar con Giovanni Jaramillo.
Corría el año 2010, un Carlos incipiente en el mundo de las 16 cuerdas dedicaba horas y horas a visualizar todo tipo de contenido pugilístico. Tenía mucha hemeroteca por disfrutar, el boxeo me avasalló sin tocarme un pelo, entró en mi cabeza y todavía no ha salido. Pues como iba diciendo, que me disperso, en ese año 2010, Marca TV con Jaime Ugarte, Emilio Marquiegui y más colaboradores, emitían boxeo, pero no sólo en diferido, también veladas nacionales en directo. Una de ellas fue la estelarizada por el campeonato de la Unión Europea del peso gallo, entre nuestro protagonista y Stephane Jamoye, el campeón, que hacía su segunda defensa. Un combate épico, con lesión incluida del colombiano afincado en España, que a su vez, no dejó de luchar hasta que ya no pudo más. Ese magnífico combate me dejó una sensación de admiración poco antes vista en mí y seguramente en muchas de las personas que gozaron esa guerra. A partir de ahí, Giovanni dejaría el boxeo profesional y unos años después abriría el Club de Boxeo Carabanchel «Giovanni Jaramillo». El belga, Jamoye, terminó siendo campeón de Europa absoluto y hasta llegó a disputar el título del mundo WBC, en Japón. Todos y cada uno de los méritos de Jamoye en su carrera, agrandan la leyenda de nuestro protagonista, que de no ser por aquella grave lesión, hoy a lo mejor estaríamos hablando de otra historia. Aunque ser campeón de España no poco.
Giovanni, no solo es ese combate, es muchas cosas más, y he querido ahondar un poquito en su historia, seguramente podamos repetir en otra ocasión, y esa vez sea cara a cara. Aquí os dejo la entrevista.
-¿Cómo te aficionaste al boxeo?
-Desde pequeño me gustó, a mi abuela le gustaba un boxeador colombiano llamado Miguel «Happy» Lora, mi abuela lo ponía, también a Mike Tyson y me gustaba, yo era muy pequeño y no estaba en mi pensamiento que algún día fuera boxeador.
-¿Cuándo empezaste a creerte que podías ser boxeador?
-Cuando empecé a ganar y ganar, yo en realidad no he hecho muchas peleas, pero de las que hice de amateur en boxeo solo perdí 3 de 29 y de full contact hice 7 y solo perdí una, así que me motivé mucho y quise luchar por ello.
-¿Cuáles son los boxeadores que más te han impresionado, ya sea en sparring o combate?
-Muhammad Ali, por todo en general, boxeo, personalidad y lo que hizo a nivel social. Mike Tyson por su espectacularidad y la forma de noquear a sus rivales. Y Julio Cesar Chávez que es mi ídolo, por no dar un paso atrás y esa gran calidad pugilística. Hay más boxeadores que me gustan, pero estos tres son mis preferidos.
–¿A qué te dedicabas aparte de boxear en aquella época?
-He trabajado de todo, de panadero, de peón de albañil, de instalador de moquetas, de camarero, lo que salía, porque solo del boxeo nunca pude vivir dando clases en gimnasios, etc…
-Alguna anécdota de tus años de boxeo.
-Hay muchas, pero esta determinó mucho mi primer cambio de equipo, iba a pelear por primera vez en Canal +, pero de profesional, porque ya lo había hecho de «neoprofesional», supuestamente venía un portugués invicto, pero no apareció, yo por esos tiempos estaba peleando en supermosca o gallo, pero mi carrera estaba enfocada al peso mosca que creo que hubiera sido mi peso perfecto para boxear, pero bueno, no aparece el portugués, yo había dado el peso y todo y solo quedaba una opción, traer a Julio Vargas, pero en el peso que estuviera Julio Vargas, me había noqueado en «neoprofesional» en un combate que iba ganando yo de calle, pero me pilló con una mano y gano él, esto ya era boxeo profesional y no por salir en la tele me la voy a jugar con alguien que a lo mejor me saca 4 kilos y que pega como una mula, si hubiera sido todo de igual a igual y el mismo peso, sabiendo que se iba a pelear contra él con tiempo no habría problema, de hecho peleamos y le gané, bueno que no era normal así que yo dije que yo no peleaba y desde entonces me empecé a sentir un poco desplazado en mi equipo por eso.
Busqué otro sitio, no es una anécdota agradable, pero fue así y no es por miedo, solo que las cosas se hacen bien o no se hacen.
-Para ir terminando. ¿Cómo ves la situación actual del boxeo en España?
-La situación actual es buena, hay más boxeadores que nunca, más entrenadores que nunca, pero sigue faltando el apoyo televisivo, los patrocinadores y que los boxeadores puedan vivir de boxeo, que no sé si aquí en España hay alguno. Bueno, sí que lo hay, pero es algo de lo que prefiero no hablar, pues la vida muchas veces es muy injusta, hay gente que hasta le pagan por no pelear, y mucho, pero eso me lo guardo.
Y también hay que buscar peleas más igualadas, no tanto bulto sospechoso que ya se sabe lo que va a pasar.
-La última. ¿Nos puedes contar tu labor actual en el boxeo, tu equipo etc?
-Yo aquí en el Club Boxeo Carabanchel soy el animador el de la limpieza y el de mantenimiento, y todavía estoy esperando que llegue, pero si no llega quiero que sepa que lo esperé siempre, y ¿Qué quiero decir con esto? Que no llega el boxeador completo o la boxeadora completa que simplemente haga caso y que si quiere entrenar contigo y cree en ti siga tus pautas y no haga lo que le dé la gana, los profesores de postín han hecho muchísimo daño y lo siguen haciendo al boxeo de verdad, al tradicional, al de toda la vida del señor, los youtubers, los ticktokers etc. para mí son solo pantomima y palabrería.
Enseño lo que buenamente puedo basándome en la lógica y la carga del peso, en mi experiencia como boxeador y con base en lo aprendido con todos los entrenadores que he tenido, de los cuales intento coger lo que me viene bien para mi forma de ver esto, para mi verdad absoluta, que no es otra que la mía.
Muchísimas gracias de parte de este frustrado, fracasado y resentido con la vida, estas palabras salen de mi mente y corazón. Un fuerte abrazo y que viva el boxeo de verdad.