Desde que el mundo es mundo y desde que el boxeo es boxeo, siempre se ha querido reunir a los mejores de la disciplina para dirimir y comprobar quién es una pizca mejor que el otro. Un fan del boxeo, normalmente, no es fanático de un solo boxeador, si te gusta el deporte sabes apreciar el buen hacer de bastantes deportistas. En el caso del boxeo, al existir categorías de peso, a veces es complicado hacer un ranking (aunque existe el Libra por Libra). Pero no son pocas las veces que a un boxeador, manager o promotor se le va la cabeza y quiere reunir a los dos mejores, o a los dos más famosos en un ring. Estoy escribiendo esto en el año 2025, desde una habitación de Ciudad Real, ambiente frío, en pleno Enero. De todas esas pistas, con leer el año ya se pueden imaginar que ese promotor al que «probablemente» se le haya ido la cabeza es Turki Alalshikh. Es el promotor de moda en el mundo del boxeo y gracias a él estamos disfrutando de combates que de otra forma todavía estaríamos reclamando. Así que, doy por bueno que de vez en cuando a Turki le vengan ganas de juntar a un peso welter natural con un peso supermedio, también natural. Parece que se va a dar este año y solo deseo que no pase ningún accidente.
Terence Crawford ha sido campeón mundial en 4 divisiones de peso (ligero, superligero, welter y superwelter). Además, en el peso superligero y en el welter consiguió unificar todos los cinturones posibles, resumiendo que logró ser el número uno allá donde ha querido serlo. Claro que para Terence hay beneficios en enfrentar a Saúl «Canelo» Álvarez, uno de ellos es la llamada «gloria deportiva«, ganar a un boxeador histórico como Canelo es redondear (más si cabe) una carrera perfecta. Otro beneficio y no menos importante sería el montante económico, que probablemente sería el mayor de su carrera y no por poco.
Ahora bien, el mayor inconveniente es la diferencia de peso y de tamaño que existe entre ambos púgiles. Todos vimos a Amir Khan ante Saúl y a Kell Brook ante Golovkin, sé que también existen ejemplos contrarios, de púgiles que ascendieron varias categorías y tuvieron éxito, pero yo hablo del riesgo previo que existe al juntar a dos boxeadores con tanta diferencia de tamaño, luego pueden pasar mil cosas.
Si hablamos del mexicano, que también ha sido campeón en cuatro divisiones (superwelter, medio, supermedio y semipesado), yo creo que tiene, más que un enfrentamiento por la «gloria deportiva», un problema que de no resolver será una pequeña mancha en su historial. No me malinterpreten, a Saúl una derrota o una victoria no le cambia la vida y menos con casi 70 combates profesionales, pero en este caso, estamos hablando de dos de los mejores boxeadores de la última década, y Crawford sería el boxeador «pequeño» que reta al «grande», creo que el mexicano tiene poco que ganar y mucho que perder.
Entrando un poco en análisis previo de lo que puede ocurrir en el ring (si es que firman). Creo que ni Canelo, ni Crawford están en el mejor momento de sus carreras al nivel reflejos, velocidad o contundencia, pero sí a nivel de experiencia y de saber explotar al máximo las limitaciones del otro y esconder las suyas. Por eso creo que veremos un combate muy táctico, con mucho detalle de calidad y del que no me aventuro a pronosticar si se impondrá la fuerza superior del mexicano o la técnica del estadounidense. Solo deseo que no haya un accidente, ni pase nada anómalo, en referencia a la diferencia de tonelaje de ambos.
Carlos Fernández.